En la noche del 18 de agosto, alrededor de las 23.15hs., dos autos merodearon en forma sospechosa la casa de nuestro compañero Jorge Hospital, testigo de la causa contra Pedraza por el asesinato de Mariano Ferreyra, quien en su declaración extendió la responsabilidad del crimen hacia las empresas que integran el grupo Ugofe, propietarias de la mayoría de las tercerizadas ferroviarias.
Ambos automóviles eran tipo Corsa, con vidrios polarizados, uno de color gris y otro negro.
El conductor del vehículo gris bajó apenas la ventanilla, tocó bocina e inquirió a la esposa de nuestro compañero si había solicitado un remis. Ante la negativa, preguntó "¿pero no es Isla Aguila 27?" y, luego de recibir una respuesta afirmativa, se retiró lentamente, giró en la esquina, se comunicó con el otro vehículo y volvieron ambos coches, a la par, avanzando lentamente hasta alejarse.
Consultadas las remiserías cercanas, ninguna envió auto alguno.
Que se diera en el marco de amenazas a otros testigos de la causa y de provocaciones dentro del ámbito ferroviario, motivó que Hospital hiciera una exposición policial en la Comisaría 1ª de Monte Grande, acompañado de la abogada Claudia Ferrero, de la Asociación de Profesionales en Lucha.
En agosto del año pasado, en oportunidad de las elecciones de delegados del Roca, Hospital también sufrió amenazas telefónicas que denunció en la misma dependencia.
¡Basta de aprietes y amenazas!
¡Fuera la patota!
¡Perpetua para pedraza y todos los responsables del crimen de Mariano Ferreyra!
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